Una increíble cantidad de gente acompañó.
Todo comenzó en San Ramón, Municipio de Cuscatlán, lugar al cual llegaron tres autobuses procedentes de San Pedro Nonualco y repletos de personas deseosas de participar en esta Peregrinación, fruto del sentimiento religioso, de la devoción y por el placer de ser testigos de una nueva experiencia. Para unos era primera vez, para otros una tradición mas, que cada ano se caracteriza por las circunstancias personales y sociales.
Pero no solo de nuestro pueblo, sino de la mayoría de Cantones y caseríos de San Ramón, que son los encargados de cada Niño y que traen sus ofrenda y son recibidos de manera especial.
Los primeros dos autobuses partieron de San Pedro Nonualco a las 2:55a.m. y llegaron a San Ramón a las 4:10a.m. patrocinados por el exalcalde Sergio Orellana, mas tarde llego el otro autobús patrocinado por la Alcaldía.
La madrugada era muy fresca y previo a comenzar la peregrinación hubo tiempo para mucho, para indicaciones o discusos, una viva..!, comer algún refrigerio y esperar al Niño Zarco que se tardó un poco, es por ello que se inició a caminar alrededor de las 5:30a.m. todavía oscuro. Los primeros en ofrendar recibían a cambio una bolsita hecha de papel Manila que contenía Pan Marquesote, unos opinaban que era quesadilla. De los encargados de un niño, no podía faltar el mas listo en poner su mano para recibir la ofrenda. Varios prefirieron ofrendar primero para recibir mucho más a cambio y no solo bendiciones. Hasta este momento los Camerinos de los Niños iban vacíos porque mas adelante se incorporaría el Niño (Jesús) en Miraflores, lugar en el cual se haría una estación para meditar y colocar a cada Niño en su respectivo Camerino y reanudar la Peregrinación.
Bajo la luz de un nuevo sol nos esperaba un largo camino.
No hay edad ni sexo, todos y todas por un mismo fin. Unos decían que para poder pasar y no mojarse los zapatos era necesario quitárselos, pero sabiendo ingeniárselas para pasar por veredas alternas uno se salvaba de mojarse, el problema era que no todos conocían el lugar y si lo conocían, cada ano cambia según es el invierno anterior y por los diferentes derrumbes, es por ello que unos con su gusto se mojaban pero otros no, por accidente se mojaban o deslizaban en las piedras. Tampoco hay un guía turista. Y debido a la enorme cantidad de personas es imposible dirigirlas a todas. Cada peregrino vivió una experiencia en particular, desde los camarógrafos que no perdían tiempo y tenían amplia libertad para hacer su trabajo y los tímidos fotografiados hasta la mujer, ancianos y los niños de corta edad, todos y todas tenemos una experiencia diferente que contar.
Una estación casi obligada es en la zona conocida como “el chorreron”, lugar donde varios aprovechan para ducharse y todos para desayunar o tomar algún refrigerio que han llevado consigo o comprando a algún campesino que ha colocado su hoya de café con pan, refrescos o frutas a orillas del río y lugar por donde pasan los peregrinos.
Tambien se habla de cruzar siete veces el río Jiboa.Caminando siete horas desde el lugar de origen hasta el lugar del recibimiento, mas otra hora para llegar hasta el templo principal de nuestro pueblo (8 horas) y un aproximado de 15 Kilómetros caminados.
Una experiencia maravillosa a pesar del enorme esfuerzo físico, era evidente el cansancio en algunas personas y buscaban aliviarlo con bebidas y pidiendo auxilio a cualquier vehiculo que se cruzaba por algunas zonas por donde podían transitar.
En fila y cruzando veredas bajo arboles y bejucos.
Este año las cosas han mejorado considerablemente, muchas personas de San Ramon, no ocultaban su admiración por la gran cantidad de gente que acompañó esta ocasión. La procesión final fue acompañada por grupos musicales y bandas para todos los gustos, unos patrocinado por particulares, otros por la Mayordomía y Alcaldía. A pesar de no estar invitados, este año vinieron también los viejos de Candelaria Municipio de Cuscatlán, que por fuerza mayor no asistieron el año pasado y que lo hacen por una tradición propia, se caracterizan por utilizar mascaras originales y muy antiguas, por el orden y mística que le imprimen a la representación de cada personaje, al final ellos se las ingenian para retornar y alimentarse de no ser recibidos en alguna Cofradía, esto por no concertar sus participación y por hacerlo a iniciativa propia. Es de reconocer el esfuerzo y realce que le imprimen a nuestras fiestas ya que sin esperar nada a cambio aportan mucho.
Pero los viejos que si estaban invitados no satisfacían las expectativas con sus mascaras “holliwodenses” plastificadas y sin gracia que vieron con recelo a los “viejos” arriba mencionados y ni siquiera fueron relevantes para fotografías.
Esta es una tradición muy antigua y la cual revive cada día mas, queda hecha la invitación para que el próximo ano se incorpore y sea testigo de lo bueno que tenemos todos los Sampedranos y Sampedranas.
El final, por las calles de nuestro pueblo y con la satisfacción de haber caminado por la fé. 
1 comentario:
Chicago Ilinois 7,de Febrero ,2008
Estimado Juan Pablo,Quiero felecitarte por la labor que ejecutas, en informarnos a todos aquellos que estamos lejos de nuestro querido pueblo, de los acontecimientos,fiestas, turnos, obras y algunas cosas absurdas que pasan, como tirar asfalto en la calle que lejos de ayudar, demuestran poca vision hacia el turismo,y me pregunto : Es atractivo santiago Nonualco con sus calles de concreto ? no no no, Es decir tenemos que diferenciarnos de otros pueblos.
Me hago otra pregunta : Demuestra Santiago Nonualco tanta devocion como la que veo en tu reportaje ? no no no.
Entonces tenemos un potencial turistico, pero hay que saber explotarlo, tenemos tecnologia ahora y podemos llegar hasta donde la imaginacion nos alcance, ah pero disculpame, no recordaba que algunos ahi no miran mas alla de sus manos.
Dejame felicitarte otra vez, aunque te quedaste corto, falta una foto desde el bordo con toda esa gente, la procesion y algun video de la fiesta en la noche.
un abrazo para todos ustedes que hacen posible todo esto
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