Estimado amigo Juan:
Aun cuando no nos conocemos, porque pertenezco a las antiguas juventudes de Sanpedranos, me permito escribirle para saludarlo y a la vez, hacerle saber lo entristecido que me siento, por la falta de vision de nuestras autoridades municipales, que poco a poco han ido desapareciendo los empedrados de nuestro querido San Pedro.
La belleza de nuestro pueblo han sido sus empedrados, que han ido muriendo al paso del modernismo, del cemento, de creer que metiendole asfalto y capas de lo que sea, por encima del empedrado, estan incluyendo al pueblo dentro de los pueblos y ciudades civilizadas.
Dejeme decirle que soy nieto de Benjamin Alfaro, un educador que dejo mucha huella dentro del campo eduativo y formacion de nuestras pasadas generaciones en base a aspectos morales y familiares.
Por historias escuchadas de esos alumnos, me permito contarle que algunas de las calles de San Pedro, fueron empedradas a iniciativa de mi abuelo, junto a todos los estudiantes de aquella epoca de la escuela Timoteo Lievano. Con piedras acarreadas de los "Siete codos" por alumnos de todas las clases sociales, la cuesta que partiendo de la Iglesia bajaba hacia la casa de la mama de nuestro querido Chamba Barillas, fue empedrada por todos ellos con mucho sacrificio y orgullo.
Entonces, enterrar toda esa belleza e historia creada por sus mismos habitantes, es lamentable, es condenar a nuestro San Pedro a engrosar la fila de lindos pueblos ahora victimas del asfalto y el cemento.
Si Dios me hubiera dado la oportunidad de vivir en nuestro querido pueblo, me hubiera opuesto a cualquier modernismo de estos y por el contrario, hubiera luchado por regenerar las calles, como una forma de mantener su espiritu colonial y turistico.
Pienso que las actuales generaciones de sampedranos, como usted respetado amigo Juan, son los salvadores en mantener esa imagen de antiguedad, muy codiciada por los turistas locales, dada el resurgimiento de ello a nivel nacional.
Tambien le manifiesto, que en Sud America, en el interior del Brasil, Paraguay y otras naciones, el cubrir con cemento o asfalto las calles empedradas de sus pueblos coloniales es totalmente prohibido; siendo ademas contrario a lo establecido, que se edifiquen construcciones que difieran con el colonialismo de esos lugares. Esos lugares como Ouro Preto, en Minas Gerais y Salvador en Bahia, son ejemplos de lo que aqui le comento y ademas destinos obligados de los amantes de ese tipo de cultura.
Porque le escribo? Porque vi en su valioso periodico digital, que se pretende "Modernizar" las calles del Barrio de Guadalupe.
Espero no se les haya ocurrido, espero no hayan enterrado con ello toda nuestra belleza cultural y por el contrario con la ayuda de todos los sanpedranos al igual como lo hiciera mi abuelo alla por los años Treinta, bien pudiera hacerse lo mismo con toda nuestra juventudad sampedrana.
Naci en San Pedro en la casa de mi abuela Ines de Cierra y con cinco años de edad, mi familia se mudo a San Salvador. Amo a San Pedro no obstante quedan muy pocos familiares y conocidos.
Reciba un fuerte abrazo.
Mario E. Cierra
Houston, TX
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Cabe destacar que, a ello todos los Alcaldes recientes, sin ninguna excepción, han contribuido a que vayan desapareciendo varios empedrados. Y si los mandan a reparar no tienen el debido cuidado de dejarlos idénticos. Y qué hacer frente a ello? Y si muchos Sampedranos se aburren de ver solo piedras? Por un lado concientizar sobre el valor que ello tiene y de los beneficios ecológicos, así como la atracción e identidad que le da al Centro de la Ciudad. Luego con las autoridades que buscan excusas para hacer "obras" que les puedan dar réditos políticos o beneficios a sus intereses, denunciarlos en los medios, pero antes darles clases para que tomen decisiones acertadas o darles el voto de castigo en la siguiente elección. Y nosotros estaremos mas pendientes de sus actos desde acá y otros medios. Será posible hacer lo contrario, que cuando se acabe el pavimento se pueda volver a empedrar bien?
(Nota del autor de este espacio)
Aun cuando no nos conocemos, porque pertenezco a las antiguas juventudes de Sanpedranos, me permito escribirle para saludarlo y a la vez, hacerle saber lo entristecido que me siento, por la falta de vision de nuestras autoridades municipales, que poco a poco han ido desapareciendo los empedrados de nuestro querido San Pedro.
La belleza de nuestro pueblo han sido sus empedrados, que han ido muriendo al paso del modernismo, del cemento, de creer que metiendole asfalto y capas de lo que sea, por encima del empedrado, estan incluyendo al pueblo dentro de los pueblos y ciudades civilizadas.
Dejeme decirle que soy nieto de Benjamin Alfaro, un educador que dejo mucha huella dentro del campo eduativo y formacion de nuestras pasadas generaciones en base a aspectos morales y familiares.
Por historias escuchadas de esos alumnos, me permito contarle que algunas de las calles de San Pedro, fueron empedradas a iniciativa de mi abuelo, junto a todos los estudiantes de aquella epoca de la escuela Timoteo Lievano. Con piedras acarreadas de los "Siete codos" por alumnos de todas las clases sociales, la cuesta que partiendo de la Iglesia bajaba hacia la casa de la mama de nuestro querido Chamba Barillas, fue empedrada por todos ellos con mucho sacrificio y orgullo.
Entonces, enterrar toda esa belleza e historia creada por sus mismos habitantes, es lamentable, es condenar a nuestro San Pedro a engrosar la fila de lindos pueblos ahora victimas del asfalto y el cemento.
Si Dios me hubiera dado la oportunidad de vivir en nuestro querido pueblo, me hubiera opuesto a cualquier modernismo de estos y por el contrario, hubiera luchado por regenerar las calles, como una forma de mantener su espiritu colonial y turistico.
Pienso que las actuales generaciones de sampedranos, como usted respetado amigo Juan, son los salvadores en mantener esa imagen de antiguedad, muy codiciada por los turistas locales, dada el resurgimiento de ello a nivel nacional.
Tambien le manifiesto, que en Sud America, en el interior del Brasil, Paraguay y otras naciones, el cubrir con cemento o asfalto las calles empedradas de sus pueblos coloniales es totalmente prohibido; siendo ademas contrario a lo establecido, que se edifiquen construcciones que difieran con el colonialismo de esos lugares. Esos lugares como Ouro Preto, en Minas Gerais y Salvador en Bahia, son ejemplos de lo que aqui le comento y ademas destinos obligados de los amantes de ese tipo de cultura.
Porque le escribo? Porque vi en su valioso periodico digital, que se pretende "Modernizar" las calles del Barrio de Guadalupe.
Espero no se les haya ocurrido, espero no hayan enterrado con ello toda nuestra belleza cultural y por el contrario con la ayuda de todos los sanpedranos al igual como lo hiciera mi abuelo alla por los años Treinta, bien pudiera hacerse lo mismo con toda nuestra juventudad sampedrana.
Naci en San Pedro en la casa de mi abuela Ines de Cierra y con cinco años de edad, mi familia se mudo a San Salvador. Amo a San Pedro no obstante quedan muy pocos familiares y conocidos.
Reciba un fuerte abrazo.
Mario E. Cierra
Houston, TX
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Cabe destacar que, a ello todos los Alcaldes recientes, sin ninguna excepción, han contribuido a que vayan desapareciendo varios empedrados. Y si los mandan a reparar no tienen el debido cuidado de dejarlos idénticos. Y qué hacer frente a ello? Y si muchos Sampedranos se aburren de ver solo piedras? Por un lado concientizar sobre el valor que ello tiene y de los beneficios ecológicos, así como la atracción e identidad que le da al Centro de la Ciudad. Luego con las autoridades que buscan excusas para hacer "obras" que les puedan dar réditos políticos o beneficios a sus intereses, denunciarlos en los medios, pero antes darles clases para que tomen decisiones acertadas o darles el voto de castigo en la siguiente elección. Y nosotros estaremos mas pendientes de sus actos desde acá y otros medios. Será posible hacer lo contrario, que cuando se acabe el pavimento se pueda volver a empedrar bien?
(Nota del autor de este espacio)
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